En la primera entrega repasamos las cuatro primeras bombas de la Prevención de Blanqueo de Capitales (PBC/FT) que afectan directamente a la operativa diaria de agentes inmobiliarios: descuidos en identificación, falta de comunicación al SEPBLAC y negligencia en diligencia debida.
En esta segunda parte abordamos las tres bombas finales, que suelen pasarse por alto pero que recuerdan el impacto devastador de las bombas de la PBC en la vida profesional y personal de los pequeños negocios inmobiliarios.


Índice
- La formación en PBC no es opcional, aunque seas tú solo
- El banco no siempre te salva
- El error con la PBC que arruina a tu familia
La formación en PBC no es opcional, aunque seas tú solo
Lo que dice la ley
La Ley 10/2010 exige que todos los sujetos obligados reciban formación específica y periódica en materia de PBC. No importa si eres un autónomo sin empleados: la obligación sigue vigente. Además, no basta con haber asistido a un curso, es imprescindible poder acreditarlo documentalmente.
Errores frecuentes
- Creer que la experiencia sustituye la formación.
- No renovar conocimientos cada año.
- No formar a nuevos colaboradores o personal externo.
- Carecer de evidencias (fecha, contenido, duración, firma).
Todas estas omisiones pueden sancionarse desde 60.000 €.


Ejemplo práctico
Un agente autónomo nunca se ha formado en PBC. En una inspección le preguntan cómo detecta operaciones sospechosas. No sabe responder. Aunque no haya cometido ninguna otra infracción, puede ser sancionado con 60.000 € solo por no cumplir la obligación de formación.
Claves prácticas
- La formación debe ser específica en PBC, no genérica ni de “sentido común”.
- Ha de renovarse como mínimo una vez al año.
- Si trabajas con colaboradores externos, también debes asegurarte de que estén formados.
- Guarda evidencias: programa, materiales, certificado o documento acreditativo firmado.
La formación en PBC no es un trámite: es tu seguro frente a sanciones.
El banco no siempre te salva
Lo que dice la realidad
Existe una falsa creencia: “Si el banco vigila las operaciones, yo no necesito hacerlo”. Error. El banco actúa como vigilante, no como escudo. De hecho, si detecta patrones de riesgo, puede cerrar unilateralmente tus cuentas sin previo aviso.
Consecuencias posibles
- Ser clasificado como cliente de riesgo.
- Cierre de cuentas y bloqueo de fondos.
- Pérdida de servicios esenciales: TPV, préstamos, transferencias.


Ejemplo práctico
Una agencia recibe pagos frecuentes desde jurisdicciones consideradas de alto riesgo. El banco, tras varios informes internos, decide cerrar su cuenta en 48 horas. No hay sanción oficial, pero el negocio queda paralizado: devoluciones de pagos, nóminas bloqueadas, operaciones detenidas.
Claves prácticas
- El banco no te exime de cumplir tus obligaciones de PBC.
- Un cierre de cuenta puede hundir la actividad en menos de una semana.
- Mantén tus propios controles: identifica, verifica y documenta.
- Evita reincidir en operaciones con fondos no justificados.
Si tu banco actúa antes que tú, quizá ya estés fuera del mercado.
El error con la PBC que arruina a tu familia
Lo que dice la realidad
En microempresas y autónomos, la línea entre negocio y vida personal es difusa. Una sanción en PBC no
solo impacta en la empresa: alcanza tu patrimonio, tu reputación y tu entorno familiar.
Consecuencias habituales
- Sanciones económicas muy superiores a la facturación anual → cierre inmediato.
- Embargo de vivienda, cuentas personales y bienes (responsabilidad ilimitada en autónomos).
- Publicación de sanciones en el BOE → pérdida de confianza de clientes y bancos.
- Inhabilitación profesional hasta 10 años.
- Estigmatización en entornos locales y profesionales.
Ejemplo práctico
Un autónomo recibe una sanción de 300.000 € por no comunicar una operación sospechosa. La multa
provoca el cierre del negocio, el embargo parcial de la vivienda familiar y la publicación en listas de
sancionados.
El resultado: pérdida de reputación en su ciudad, exclusión del sistema bancario y ruina
económica de la familia.
Claves prácticas
- Una sanción grave no se queda en el CIF: golpea directamente tu patrimonio personal.
- Reconstruir reputación tras aparecer en el BOE es casi imposible.
- La prevención y la formación son la única vacuna frente a este escenario.
Un error en PBC no es como una multa de tráfico: puede costarte el negocio, tu casa y tu nombre.
Conclusión
Las tres bombas finales de la PBC muestran que el coste del incumplimiento trasciende lo económico:
puede poner en riesgo tu relación con la banca, tu reputación e incluso una bomba de la PBC puede poner en riesgo la estabilidad de tu familia.
Por eso, la prevención no es un requisito administrativo, sino una decisión estratégica para proteger tu
futuro personal y profesional. La Ley puede permitirte ser pequeño, pero nunca te permitirá ser ignorante.
Emilio Ballester
Instructor
638 968 679
Economista
Auditor de Cuentas (R.O.A.C. n/e)
Experto en PBC/FT - SEPBLAC
Este contenido es divulgativo y no sustituye asesoramiento jurídico profesional. Si desea plantillas y formación práctica, consulte nuestros cursos especializados.







