En el complejo y dinámico entorno empresarial, las decisiones de inversión, fusiones y adquisiciones conllevan riesgos significativos que pueden afectar no solo el éxito de la transacción, sino también la estabilidad financiera y operativa a largo plazo.
La due diligence se erige como un proceso esencial para mitigar estos riesgos, proporcionando al empresario las herramientas necesarias para tomar decisiones informadas y proteger su inversión.
Índice
- La Due Diligence, más que un trámite, una necesidad fundamental
- Ejemplo práctico: Caso ficticio de ahorro significativo
La Due Diligence, más que un trámite, una necesidad fundamental
Si te estás preguntando ¿Qué es due diligence? o ¿Qué significa due diligence? Podemos decir que la due diligence no es simplemente una revisión superficial de documentos, sino un análisis exhaustivo que permite al empresario conocer en profundidad la empresa que está considerando comprar.
La utilidad o “due diligence significado” de este proceso es innegable, ya que permite identificar riesgos ocultos, validar la información proporcionada y negociar un precio de compra justo.
Para terminar de aclarar, ¿Due Diligence qué es y para qué sirve?, hay que destacar que la falta de una due diligence adecuada puede llevar a pérdidas significativas y a la aparición de sorpresas negativas que pueden poner en peligro no solo la inversión, sino la estabilidad financiera de la empresa compradora.
El Peligro de no realizar una Due Diligence adecuada
Imagina a un empresario que, entusiasmado por la oportunidad de adquirir una empresa, decide omitir el proceso de due diligence o realizar un análisis superficial. Sin esta revisión detallada, se expone a una serie de riesgos que podrían incluir:
- Pasivos ocultos que no fueron revelados inicialmente.
- Problemas legales no identificados que podrían llevar a costosos litigios.
- Discrepancias financieras que podrían hacer que la empresa sea menos rentable de lo que parecía.
Estos riesgos no son meras posibilidades teóricas; son realidades que muchos empresarios han enfrentado cuando no han realizado una due diligence adecuada. La inversión inicial puede parecer una «pequeña inversión», pero el ahorro y la seguridad que proporciona superan con creces su costo.
Ejemplo Práctico: Caso ficticio de ahorro significativo
Contexto: La compra de una empresa de software
Como “Due Diligence ejemplo”, imaginemos a dos empresarios, Ana y Miguel, que están interesados en adquirir una empresa de software llamada «Tech Solutions S.A.», una compañía mediana que se ha destacado en el desarrollo de aplicaciones móviles personalizadas.
Ambos empresarios ven un gran potencial en la empresa, que muestra un crecimiento anual del 15% y tiene una cartera de clientes en expansión.
La empresa se ha valorado en 10.000.000 euros, y el propietario actual está dispuesto a venderla debido a su deseo de retirarse y disfrutar de su jubilación. Sin embargo, a pesar de las aparentes oportunidades, la situación interna de «Tech Solutions S.A.» es más compleja de lo que parece.
Opción A: Ana compra sin Due Diligence
Ana, confiada en los informes financieros y las declaraciones proporcionadas por el vendedor, decide no invertir tiempo ni dinero en realizar una due diligence exhaustiva. La información que tiene a mano muestra que la empresa ha sido rentable durante los últimos cinco años, con un flujo de caja positivo y un sólido equipo técnico.
Considera que la compra es una excelente oportunidad y procede a adquirir la empresa por los 10.000.000 euros solicitados. Sin embargo, apenas unos meses después de la adquisición, Ana comienza a enfrentar serios problemas.
Una auditoría interna revela que la empresa enfrenta un pasivo contingente de 6.000.000 euros relacionado con un litigio pendiente por una supuesta infracción de derechos de propiedad intelectual.
Este litigio había sido iniciado por una gran corporación tecnológica, y aunque estaba en sus primeras etapas, la posibilidad de perder el caso y enfrentar una sanción financiera significativa era alta.
Además, Ana descubre que varios de los contratos clave con clientes estaban a punto de expirar y que los clientes estaban considerando cambiar de proveedor debido a problemas con la calidad del servicio que no habían sido revelados durante las negociaciones. Estos factores no solo afectan la rentabilidad de la empresa, sino que también complican su capacidad para mantener su crecimiento.
La falta de una due diligence adecuada ha dejado a Ana con una empresa que vale mucho menos de lo que pagó, con riesgos legales que amenazan su estabilidad financiera. En lugar de ser una adquisición estratégica, la compra de «Tech Solutions S.A.» se convierte en una fuente de preocupaciones y pérdidas financieras.
Opción B: Miguel invierte en Due Diligence
Por otro lado, Miguel, un empresario más cauteloso, decide invertir 20.000 euros en una due diligence exhaustiva antes de cerrar la transacción. Miguel contrata a un equipo de expertos compuesto por abogados, contadores y expertos en consultoría financiera para que examinen cada aspecto de «Tech Solutions S.A.».
Proceso de Due Diligence
- Due Diligence Financiera: Los contadores revisan los estados financieros de la empresa y detectan inconsistencias en los registros contables. Descubren que algunos ingresos reportados no se habían recibido aún, lo que significa que la empresa estaba inflando sus ganancias.
También identifican problemas en la proyección de flujo de caja, que no había considerado una caída en la demanda de uno de los productos clave de la empresa.
- Due Diligence Legal: Los abogados revisan todos los contratos de la empresa, incluyendo los acuerdos con clientes y proveedores. Durante esta revisión, descubren el litigio pendiente por la infracción de derechos de propiedad intelectual.
Aunque el caso aún no había sido resuelto, el riesgo de perderlo era alto, lo que podría resultar en una sanción multimillonaria.
- Due Diligence Tecnológica: Los consultores de tecnología revisan el código fuente de las aplicaciones desarrolladas por «Tech Solutions S.A.» y descubren que una parte significativa del software utilizado estaba basado en código de terceros, sin las licencias adecuadas.
Esto no solo agrava el riesgo del litigio pendiente, sino que también pone en peligro la sostenibilidad de las operaciones a largo plazo.
- Due Diligence Operacional: Durante la revisión de las operaciones, el equipo descubre que varios de los empleados clave, incluidos los desarrolladores principales, estaban planeando dejar la empresa debido a la falta de incentivos y oportunidades de crecimiento.
Esto significaba que la empresa podría perder gran parte de su talento, lo que comprometería su capacidad para continuar innovando.
Resultados de la Due Diligence
Gracias a la auditoria Due Diligence, Miguel está al tanto de todos los problemas ocultos de «Tech Solutions S.A.» antes de finalizar la compra. Armado con esta información, negocia con el vendedor y logra reducir el precio de compra a 4.000.000 euros, lo que refleja de manera más precisa el valor real de la empresa considerando los riesgos identificados.
Además, Miguel exige que el vendedor resuelva el litigio pendiente como condición para completar la transacción, evitando así el riesgo de un pasivo financiero futuro. También implementa un plan de retención para los empleados clave, asegurando que el talento crítico permanezca en la empresa después de la adquisición.
Conclusión del caso
Al invertir en la due diligence, Miguel no solo evita sorpresas financieras y legales, sino que también asegura una adquisición más estratégica y rentable. El ahorro total resultante de la due diligence es de 5.980.000 euros, además de la protección de su inversión a largo plazo.
Este caso ficticio destaca cómo una «pequeña inversión» en due diligence puede hacer una diferencia monumental en el resultado de una transacción empresarial. Mientras que Ana, al no realizar una due diligence, se enfrenta a pérdidas significativas y a una empresa con problemas ocultos, Miguel asegura una compra exitosa y estratégica con su informe Due Diligence que fortalecerá su negocio en el futuro.
Due diligence, se puede considerar como parte de los fundamentos del control interno en PYMES, aunque no sea un elemento tradicional del control interno en sí mismo.